"Para promover un desarrollo de verdad sostenible, es necesario abrirse con creatividad a itinerarios nuevos, más integrados, compartidos, conectados directamente con las personas y sus contextos”. Así lo subrayó el Papa Francisco en la mañana de este sábado 21 de mayo a los participantes en el congreso internacional “Nature in Mind. Una nueva cultura de la naturaleza para el cuidado de la biodiversidad”, organizado por el Arma de Carabineros. Al inicio de su intervención, el Santo Padre dio la bienvenida a todos y agradeció al Comandante General por sus corteses palabras. A su vez, expresó el reconocimiento por la iniciativa del Congreso, que demuestra la voluntad de colaboración -dijo- por proteger juntos nuestra casa común.

“Es un viaje formativo para la mente y para el alma”

Refiriéndose al título del congreso, el Papa aseguró que hace pensar en el itinerario de San Buenaventura de Bagnoregio, quien en muchas ocasiones invita a descubrir lo Trascendente aun a través de la contemplación de la belleza de la naturaleza. Cuando contemplamos con asombro el cielo y las estrellas o las aguas cristalinas de un arroyo, por analogía contemplamos al autor de la belleza (cf. Sab. 13,3). El Obispo de Roma enfatizó que esta belleza ha sido dada como regalo al género humano, que está llamado a cultivarla y conservarla (cf. Gn. 2,15). En las Sagradas Escrituras, lo bello y lo bueno son inseparables. La vida y la historia -subrayó Francisco- demuestran, de hecho, que no podemos ser nosotros mismos sin el otro y sin los demás. En un mundo en el que "todo está íntimamente relacionado" (Laudato si’, 137), es necesario identificar nuevos paradigmas pedagógicos que se promuevan en los procesos educativos, apuntando al diálogo de saberes y contribuyendo al crecimiento de una cultura del cuidado.
“Y la cultura del cuidado es una cultura de la armonía, es conservar la armonía, y no una cultura de los detalles que rompe la armonía.”

Una educación basada en los pilares de la ecología integral

Frente a la riqueza y la complejidad del mundo natural, afirmó el Pontífice, cada proyecto educativo ofrece una perspectiva de comprensión que hace hincapié en las interrelaciones entre el hombre y el medio ambiente. Cualquier medida será ineficaz si no va acompañada de un proceso educativo que promueva el cuidado y la protección de nuestra casa común. El Sucesor de Pedro recordó el llamado de todos a “formar una red de relaciones humanas que rechace toda forma de discriminación, violencia y prevaricación”. En esta "aldea" nuestra -aseveró el Papa-, la educación se convierte en portadora de fraternidad y generadora de paz entre los pueblos, así como de diálogo entre las religiones.

“Renuevo mi aprecio por vuestro compromiso cotidiano”

Al final de su alocución, Francisco exhortó a los participantes en el congreso a continuar el compromiso con valentía. Extendió una bendición sobre los presentes y sus familiares. Les deseó un buen trabajo y, como es costumbre, les solicitó que recen por él."