Abrir el texto de la renovación de la Alianza (17h 0 horario de Alemania)
Ver esa puerta abierta hace que el corazón lata con más fuerza y lo llene de alegría. La expectativa nace de la certeza: entraré y encontraré a alguien muy especial.
Quien sella la Alianza de Amor con María participa de sus promesas y exigencias. Son los regalos que María ofrece y lo que pide a cada persona a cambio. En este 18 de octubre queremos recordar el primer regalo que nos hace la Alianza de Amor, la presencia de María en el Santuario: «Me estableceré con alegría en medio de ustedes».
Imagina que, aunque vivas en una casa sencilla y pequeña, haces una invitación especial a un rey, una reina o alguna gran autoridad para que te visite. Por sorprendente que parezca, esta persona acepta la invitación y, además, se queda a vivir contigo. Eso es más o menos lo que ocurrió el 18 de octubre de 1914, con la diferencia de que la Reina era más importante que cualquier autoridad de esta tierra, fue enviada por Dios mismo.
Me estableceré con alegría en medio de ustedes
En la fundación de Schoenstatt, la Madre tres veces Admirable se hace pequeña para encontrarse con sus hijos pequeños, y precisamente en este gesto revela su grandeza. Acepta la invitación y transforma el Santuario en un hogar.
«Me estableceré con alegría en medio de ustedes”. No hay duda de que esta promesa se ha cumplido: los dolores se curan, los vicios se superan, los bebés nacen, los proyectos funcionan… Hay infinidad de testimonios que demuestran la presencia de la Virgen en el Santuario. Pero incluso si nadie dijera nada, basta que ingreses para vivirlo.
«Nuestra Madre y Reina está presente en el Santuario porque en el cielo intercede ante Dios por todos los que buscan encontrarse con ella y se entregan a ella en este lugar, animados por la fe de que Dios ha decidido conceder gracias especiales a quienes se las piden a María. Estas gracias que se regalan en el Santuario -como todas las gracias cristianas- son gracias de encuentro con Cristo, pero a través del encuentro con la persona de María», escribe el Padre Hernán Alessandri. [1]
Cada vez que se renueva la Alianza, o cuando una persona sella su Alianza de Amor, vuelve a resonar la promesa: «Me estableceré con alegría en medio de ustedes».
Sus ojos nos buscan continuamente
Es interesante notar la expresión «con alegría». María se alegra de estar con nosotros, desea estar con sus hijos, como dijo una vez el Padre José Kentenich:
«Me imagino fácilmente cómo nos mira la Mater desde el cielo o aquí en el Santuario. Sus ojos nos buscan continuamente. Quiere saber dónde están su hijo y su hija, dónde trabajan, si están en peligro, si el hijo y la hija están en medio de miles de personas. Los ojos de María no descansan hasta que encuentran a su hijo, a su hija”.[2]
Esta presencia real en el santuario aporta una gran alegría, pero también el compromiso de vivir las exigencias como respuesta de amor. Y más aún si tenemos en cuenta toda la red de santuarios: Hogar, Parroquia, Corazón – «Me estableceré» es válido para cada uno de ellos. ¿Cómo podemos mostrar toda la alegría y gratitud por esta presencia? Cada uno puede encontrar su propia respuesta en este día de la Alianza de Amor y colocarla en el capital de gracias.
Abrir el texto de la renovación de la Alianza (17h – horario de Alemania)
Fotos: Sr. M. Nilza Pereira da Silva
[1] ¿Qué significa el Santuario de Schoenstatt?
El Padre Hernán Alessandri Morandé. 2ª edición. Editor: Pallotti
[2] Padre José Kentenich. Los lunes por la tarde, vol. 3, p. 116.
Fuente: Schoenstatt Brasil