
¿Schoenstatt es un movimiento de educación? Colaboración al servicio de la vida.
Los schoenstattianos somos un movimiento de educación. Somos oficial de enlace entre ciencia y vida, teología y vida; psicología y vida, según el P. Kentenich.
En esta página encontrarás artículos y noticias sobre temas que profundizan la vida espiritual y te ayudan a crecer interiormente. Trabajamos temas como la autoeducación, la formación de la persona nueva, pedagogía y mucho más.
Los schoenstattianos somos un movimiento de educación. Somos oficial de enlace entre ciencia y vida, teología y vida; psicología y vida, según el P. Kentenich.
El P. Antonio Bracht nos ofrece algunas recomendaciones para dar una mirada interior a nuestra vida espiritual, un camino que se recorre de la mano de Dios y que, con sus altibajos, nos enseña que la gracia y el Espíritu se hacen presentes en nuestra vida práctica y en nuestro día a día.
Argentina festejó los 70 años del Santuario del Padre, en Nuevo Schoenstatt, con tres días de profundización en la misión y la herencia del P. Kentenich
El 20 de enero de 1942 el P. Kentenich decidió no hacer nada por evitar ir al campo de concentración de Dachau, rechazando un trámite que podría haberlo salvado. Fundamentó su decisión en la fe práctica en la divina Providencia, la voz que sintió en su corazón.
En el Santuario Original, en la fundación de Schoenstatt, Dios se manifestó de nuevo a la humanidad a través de María.
Ellos son sabios de la vida y del camino, no de ideas y de libros
El 1ro. de enero la Iglesia celebra la Solemnidad de María como Madre de Dios, conmemorando el dogma de la Maternidad divina de María en Jesús, promulgado así por el Concilio de Éfeso en el año 431.
Susanne Leibrecht, que pertenece al Movimiento Femenino de Schoenstatt, dice: «Cuando la gente conoce Schoenstatt, ama Schoenstatt, vive del espíritu de Schoenstatt, las relaciones tienen una calidad diferente. Rápidamente tienes una conexión de corazón y también te apoyas mutuamente cuando las cosas se ponen difíciles».
Navidad es la fecha cuando nace nuestro redentor Jesucristo y trae a la humanidad, a cada uno de nosotros su Luz.
Jesús, por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre.
Ahí está ella para decirnos: “¿no estoy yo aquí, que tengo el honor y la dicha de ser tu madre?
Podemos entender el dogma de la Inmaculada Concepción mirando hacia la santidad de María