El cardenal Parolin subrayó la importancia del encuentro. El arzobispo Bätzing ofreció una lectura de los trabajos del Camino sinodal alemán.
Visita ad Limina Apostolorum
Esta mañana se ha celebrado una reunión interdicasterial en el Instituto Augustinianum, en Roma, a la que han asistido, junto con los responsables de algunos dicasterios de la Curia romana, los 62 obispos de la Iglesia católica en Alemania presentes para la Visita ad Limina Apostolorum. «El encuentro», dice un comunicado conjunto de la Santa Sede y la Conferencia Episcopal Alemana, «se había planeado desde hace tiempo como una oportunidad para reflexionar juntos sobre el Camino sinodal en curso en Alemania, convocado en respuesta a los casos de abusos sexuales a menores por parte de clérigos”.
El encuentro fue moderado por el cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, quien al introducir los trabajos -informa el comunicado- «recordó el vínculo de comunión y amor que une a los obispos entre sí y al Sucesor de Pedro». Subrayando la importancia del encuentro como momento de compartir y de gracia, de unidad en las diferencias. El cardenal Parolin mencionó las preocupaciones que suscita el Camino sinodal, señalando el riesgo de «reformas de la Iglesia y no en la Iglesia».
En su introducción -continúa el comunicado- Monseñor Georg Bätzing, obispo de Limburgo y presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, «ofreció una lectura de los trabajos del Camino sinodal alemán, y destacó su espíritu, basado en la escucha del Pueblo de Dios y en el dolor por los abusos cometidos por miembros del clero. Monseñor Bätzing también enumeró los temas tratados en las asambleas: Poder y división de poderes en la Iglesia – Participación comunitaria y planificación misionera; La vida sacerdotal hoy; Las mujeres en los ministerios y cargos de la Iglesia; Vivir en relaciones que funcionan – Vivir el amor en la sexualidad y en las relaciones de pareja. Por último, el presidente de la Conferencia Episcopal Alemana expresó su aprecio por los trabajos del Sínodo convocado por el Papa para toda la Iglesia y por la decisión de ampliar el plazo del Sínodo».
Informes teológicos de los Cardenales
A continuación, los informes teológicos de los cardenales Luis Francisco Ladaria, Prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, y Marc Ouellet, Prefecto del Dicasterio para los Obispos, «han abordado con franqueza y claridad las preocupaciones y reservas sobre la metodología, los contenidos y las propuestas del Camino sinodal, proponiendo, en beneficio de la unidad de la Iglesia y de su misión evangelizadora, que se incluyan en el Sínodo de la Iglesia Universal las peticiones que han surgido hasta ahora».
En el diálogo que se abrió después -informa el comunicado conjunto- «participaron numerosos obispos alemanes y representantes de la Curia. Así surgió la importancia y también la urgencia de definir y profundizar en algunos de los temas destacados, por ejemplo, los referidos a las estructuras de la Iglesia, al ministerio sagrado y al acceso a él, a la antropología cristiana. Al mismo tiempo, hubo una plena conciencia, por parte de todos, de que están en camino con el entero Pueblo de Dios, santo y paciente, incluso en la confrontación entre las diversas posiciones. Precisamente en este sentido, muchas intervenciones señalaron la centralidad de la evangelización y la misión como objetivo último de los procesos en curso, así como la conciencia de la indisponibilidad de ciertos temas».
«En esta perspectiva de intercambio abierto y fraterno, se hicieron varias propuestas, como la de aplicar una moratoria al Camino sinodal alemán, que no ha encontrado espacio, y la de favorecer una mayor reflexión y escucha mutua a la luz de las perplejidades que han surgido. Al concluir, el Secretario de Estado expresó su agradecimiento por el encuentro, no formal, pero sí necesaria y constructiva, que ‘no puede ser despreciada’ en los caminos que se están recorriendo». El comunicado conjunto concluye afirmando que «se acordó la necesidad de continuar la escucha y el diálogo recíproco en los próximos meses, para que contribuyan al enriquecimiento del Camino sinodal alemán y del Sínodo universal de la Iglesia».