Congreso de la Virgen Peregrina: Internacionalidad y mirada al futuro

Karen Bueno

El Congreso Internacional del Apostolado de la Virgen Peregrina amaneció este jueves 11 de septiembre en un ambiente de cenáculo. Diferentes idiomas resuenan por todo el Club Dores, pero, entre gestos y expresiones de alegría, todos se entienden en el «idioma» de la Alianza de Amor.

¿Qué diría João Pozzobon si hoy viera este gimnasio lleno de gente en Santa María? Es difícil de imaginar, porque seguramente no habría palabras suficientes. María Angélica Valencia, de la delegación de Estados Unidos, se atreve a responder: «Creo que estaría muy emocionado y, debido a esa emoción, le daría las gracias a la Mater, porque la misión que ella le confió se está cumpliendo y este es el fruto de esa gran dedicación. Y, conociendo su manera de actuar, imagino que le preguntaría a la Mater: «¿y ahora, qué quieres de esta misión?».

Una «explosión» de dones del Espíritu Santo

El programa inicial comenzó con la oración de la mañana y se profundizó con la celebración de la Santa Misa. La Eucaristía fue presidida por Monseñor Melchor Sánchez, sacerdote español que fue relator del Proceso de Pozzobon en el Dicasterio para las Causas de los Santos. Comienza la homilía destacando la «explosión» que hubo en Pentecostés y también menciona la importancia de María en la vida de Cristo y de la Iglesia.

P. Alexandre Awi Mello, Mons. Melchor Sánchez, P. Felipe Ríos

Hablando de João Luiz Pozzobon, monseñor Sánchez revela: «Pozzobon es grande no por haber hecho muchas cosas, sino porque escuchó la Palabra de Dios y la puso en práctica. Acogió la Palabra, la concibió y la hizo carne en su vida, dándola a luz de manera generosa e incansable». Y añade: «María se llama a sí misma «la humilde sierva del Señor. Pozzobon, con humildad, se consideraba el burrito de la Madre Peregrina. Hagámonos también nosotros burritos de la Madre, para llevar la gracia y la luz de María a todos».

Madre Peregrina de la Esperanza

Tras un breve intervalo, comenzó el momento formativo «Hoy: mirar desde la historia hacia el futuro – misioneros de la esperanza». La experiencia, preparada por el Secretariado del Apostolado de la Virgen Peregrina de Atibaia (Brasil), reunió 75 antorchas delante del escenario. Cada una de estas antorchas representaba los signos de esperanza en la vida de João Pozzobon, en el Apostolado y en la vida de todos los misioneros.

Los textos de reflexión se intercalaron con vídeos que mostraban impactantes testimonios de varios países. Personas de Polonia, Portugal, Burundi, Eslovaquia, Paraguay y otras muchas naciones contaron las maravillas que la Madre Peregrina realiza en sus regiones. Los testimonios mostraban familias que habían vuelto a la Iglesia, matrimonios restaurados, el trabajo social realizado en escuelas, prisiones y hospitales, además de muchos otros signos de esperanza que el Apostolado difunde por el mundo.

Miramos al pasado y al presente, pero ¿y el futuro?

Todas las reflexiones anteriores fueron sintetizadas por el P. Alexandre Awi Mello. Comienza diciendo que «el Jubileo es un tiempo de gracia para renovarnos en las fuerzas que nos dieron origen y refundarnos, proyectarnos de nuevo, con nuevas fuerzas, nuevo ardor, con creatividad». Y subraya: «Los próximos 75 años no serán una repetición de los 75 años pasados. Serán construidos por otras personas: USTEDES y otros que ustedes conquistarán. No será una «fotocopia», será algo original».

Como colofón de toda la reflexión, el P. Alexandre invita a los misioneros del Apostolado a reflexionar: «¡Los próximos 75 años los construiremos cada uno de nosotros, con nuestro ardor, amor, creatividad y originalidad! ¿Cómo podemos continuar la misión de João Pozzobon para seguir siendo ese signo de esperanza? ¿Cómo podemos alimentar la llama de la esperanza que se encendió el 10 de septiembre de 1950»?

Grupos de trabajo

La tarde se dedicó a los talleres, que se dividieron en 13 temas: Apostolado Infantil Juvenil, inserción eclesial, juventud y peregrina, Causa João Pozzobon, por la vida que comienza, Peregrinas Auxiliares, formación de misioneros, vídeo sobre João Pozzobon, vocaciones, P. Esteban Uriburu, Día de la Alianza, Rosario y Europa.

Varias salas alrededor del Santuario Tabor y del Centro Mariano recibieron a grupos para estudiar y profundizar estos temas.

Ante el Señor

Por la noche, los congresistas se reunieron nuevamente en el Club Dores para rezar el rosario. Las «Ave Marías» se rezaron en muchos idiomas, formando un rosario luminoso con las banderas de los países.

A continuación, la bendición del Santísimo emocionó y coronó la noche. Destaca el entusiasmo de la Juventud de Schoenstatt que, a pesar del gran esfuerzo de trabajo, sigue animada y contagiando a todos con cantos y toda su alegría.

¿Qué diría João Pozzobon al ver todo esto? «Ahora aquí se está abriendo la flor más hermosa: la Apostolado va a ser mundial. Internacional ya es, pero va a ser mundial», dijo un día. Y hoy podemos responder: «Sí, Sr. João, YA ES mundial; ¿y sabe por qué? Porque, por voluntad de Dios, un solo hombre pudo mover al mundo entero».

Fotos: Marcia Kazumi

Traducción: Hna. M. Lourdes Macías

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