“Todos participan”, eso es lo que une a la gente en el tradicional Festival Internacional del Encuentro en Schoenstatt: las diferentes generaciones, las distintas nacionalidades y grupos de idiomas, los schoenstattianos de corazón y los simpatizantes de Schoenstatt, los de la localidad de Vallendar y los participantes que viajaron desde Regensburgo, Mainz, Frankfurt, Luxemburgo, etcétera. “Atmósfera” y “comunidad” se utilizan a menudo como palabras clave para describir en qué consiste esta celebración.
Todo el mundo participa
El festival se nutre de la diversa participación de personas y grupos muy diferentes, y a niveles muy distintos. De ahí su atmósfera especial. “Gracias por dejarnos participar”, dicen las dos parejas brasileñas que viven en Luxemburgo y que, una vez más, han viajado con antelación para colaborar.
Las canciones y bailes de Perú y Chile, Filipinas, Bulgaria y Alemania son aplaudidos. También fueron bien recibidos los diversos bailes de acompañamiento, incluida la polca del cuco. Ricardo Filho, brasileño residente en Luxemburgo, aceptó la petición de conducir el acto, a pesar de que su vuelo a Brasil con su familia estaba previsto para el día siguiente. No podía rechazar a la Mater, dijo, ya que había hecho la Alianza de Amor. Él también irradia la serenidad llena de confianza de “Regalarle a Dios una hora más” en la llovizna de la mañana.
Encuentro
El festival se nutre sobre todo de los distintos niveles de encuentro: encuentro con las nacionalidades de los invitados, encuentro con las culturas de los participantes, encuentros personales en medio de todo.
El hecho de que Herbert Wirtz, del barrio de Gymnich, ofreciera por primera vez música de organillo realzó enormemente el momento de encuentro. Le da al festival un toque acogedor que a todos nos viene bien. Una característica especial del festival es el encuentro con Schoenstatt como lugar de gracias. Esto incluye la Misa organizada internacionalmente al comienzo. Este año incluyó la contribución de las candidatas de las Hermanas de María de Schoenstatt: “Lo que me gusta de Schoenstatt…”. Y tradicionalmente incluye la procesión con velas hasta el Santuario Original.
En portugués, español, inglés y alemán, los moderadores de la celebración, Rosario Lira y Ricardo Filho, preparan el ambiente para el momento culminante y la conclusión del día: la renovación de la Alianza de Amor en la propia lengua materna y la bendición individual en el Santuario Original.
Una tradición con futuro
Por un lado, el Festival del Encuentro es ya una tradición en Schoenstatt, y por otro, alberga potencial para el futuro, pues la internacionalidad en Schoenstatt y en la comunidad de Vallendar, a la que pertenece Schoenstatt, va en aumento. En conversación con la Banda de Fanfarria de Vallendar, que participa por primera vez en el Festival del Encuentro, queda claro que una buena cultura del encuentro, una convivencia apreciativa de todas las culturas y mentalidades, son preocupaciones comunes. “Hasta la próxima”, dijo la banda de fanfarria al despedirse del evento en Schoenstatt, preparándose ya para la celebración de su 40 aniversario en 2025, que será en el próximo Festival del Encuentro, el 17 de agosto de 2025.
Traducción: Vanessa Franke
Fuente: schoenstatt.de