El 1ro. de octubre de 2022 se celebró el 25º aniversario de la Campaña de la Virgen Peregrina en Alemania. La Virgen Peregrina, la imagen de María bendecida en el Santuario de Schoenstatt, recorre más de 6.000 círculos de peregrinos en todo el país. En todo el mundo la acción de la Campaña de la Virgen Peregrina llega a varios millones de personas.  Forma parte del Movimiento de Schoenstatt internacional que, con sus más de 20 comunidades y grupos, quiere llevar a Dios al mundo de nuevo en nuestro tiempo como María, y en la Alianza de Amor con ella.

Difundir el Evangelio en una parte de la cultura cotidiana

El obispo Wolfgang Ipolt, de la diócesis de Görlitz, al este de Alemania, vino a Schoenstatt para la celebración del jubileo porque ve en este apostolado una contribución a la nueva evangelización en nuestro país. «Con la Campaña de la Virgen Peregrina, una parte de nuestra cultura cotidiana se impregna del Evangelio», dijo el obispo a los 800 fieles presentes. «No hay lugar sin fe, o sin Dios». La Virgen que peregrina en los espacios cotidianos de la gente es «un recordatorio visible de que el Señor quiere que lo encontremos y que demos testimonio de Él en todas partes».

Esto se pudo experimentar de muchas maneras durante esta celebración. Ya en la vigilia de la víspera pedimos por la paz en el continente europeo y en todo el mundo, ahora especialmente en Rusia y Ucrania. Las imágenes de la Virgen Peregrina están recorriendo en ambos países. Las banderas de ambos países se trasladaron juntas a la iglesia, como símbolo de la ferviente oración para que estos pueblos encuentren la paz. Durante la misa del 1ro. de octubre por la mañana se trajeron al altar cestas con tarjetas postales. Muchas personas han enviado aquí «correo a María» en los últimos meses: agradecimientos por la cercanía de Dios que han experimentado, peticiones, temores, oraciones en lenguaje cotidiano que expresan lo que realmente les conmueve.

La piedra azul de la corona: poderoso signo

El obispo coronó a la imagen Auxiliar de la Campaña de la Virgen Peregrina, en la que la piedra azul de la corona ocupa un lugar central. Es el azul del cielo -cada persona es preciosa y valiosa como regalo del cielo-. Es el azul del agua -recuerdo del bautismo-. Es el azul del planeta Tierra, en peligro por las guerras, el terror, el hambre y los desastres medioambientales. Es el azul de la bandera europea: María ha intervenido repetidamente para salvar a Europa a lo largo de su historia. Así, la coronación de María combina aspectos naturales y religiosos con la certeza de que ella interviene en nuestras vidas, y nos dice: ¡No tengan miedo, aquí estoy!

Testimonios que emocionan

«La visita de la Virgen Peregrina en un hogar hace que Dios esté presente», expresó Mons. Ipolt, palabras que se replicaron de muchas maneras a la hora de los testimonio compartidos en la tarde. Algunas jóvenes contaron lo que significa para ellas su Virgen Peregrina postal que es una imagen peregrina que se envían mensualmente por correo postal. «Siempre pasan muchas cosas, mucho ajetreo en la vida cotidiana …. Pero cuando llega el Santuario Postal Peregrino, es como un descanso activo en el gimnasio», dice una de ellas. Y otra: «Gracias a que María llega casi mensualmente con cada una y camina acompañada de un pequeño cuaderno en el que escribimos nuestras intenciones y oraciones personales, ha crecido una relación estrecha y profunda entre nosotras».

Una familia de cuatro miembros cuenta lo que significa la Virgen Peregrina para ellos. «María siempre llega en el momento oportuno y ayuda; esto lo he podido experimentar toda mi vida», comparte la mamá en su testimonio. Tras una infancia y juventud difíciles, el papá encontró la sanación interior y una fe sostenible a través de María. La hija de nueve años relató lo contenta que está, ya que logró que otros compañeros se unieran a un círculo que inició cuando se estaba preparando para la Primera Comunión. El hijo de 14 años comparte que hay una costumbre que ha crecido en la familia y que significa mucho para ellos: el rosario iluminado en el día de la Candelaria.

Los testimonios lo dejan claro: María lleva a Dios al mundo, donde se le necesita.

Algunos de los que están aquí se habían cerrado a la fe y a la Iglesia, o no se habían involucrado en un principio. A través de su encuentro con María, han experimentado una Iglesia cercana. Eso les ha convencido.

Consagrando Alemania a María

Al final de la celebración, el punto culminante en el Santuario Original fue consagrar Alemania a María en nombre de todos los presentes. Desde el comienzo del Año Jubilar, hace 27 semanas, se ha rezado intensamente en un «maratón de oración» por las 27 diócesis de la Iglesia alemana para que cada semana se logre un nuevo comienzo de fe, esperanza y amor para los habitantes de esa diócesis.

Se entregaron en el Santuario 27 pergaminos en los que se enumeran todos los lugares por los que camina la Virgen Peregrina de Schoenstatt. Por último, se volverán a enviar todas las imágenes peregrinas y se enviarán otras nuevas, tres de ellas a la diócesis de Görlitz.

Lo que Wolfgang Ipolt expresó sobre la Campaña de la Virgen Peregrina se pudo experimentar en esta celebración: «Esto es más que un proyecto, es un camino misionero de fe que Schoenstatt inició y que entre tanto ha puesto a muchas personas en contacto con María y su Hijo».