En la noche del 30 de agosto de 2024, más de 300 jóvenes y adolescentes de toda Alemania comenzaron el festival de fe «Noche del Santuario» de la Juventud de Schoenstatt de Alemania en Schoenstatt, Vallendar, con un animado acto de apertura. El lugar: el escenario del festival, que este año estaba situado en la Arena de los Peregrinos.
La mañana del sábado se dedicó al tema “Encontrar el sentido”. Siguiendo la convicción de que “la vida se enciende con la vida”, diez personas dieron su opinión, en directo o en pantalla, sobre cómo emprendieron la búsqueda del sentido y qué tiene que ver el lema de la noche del Santuario con sus vidas concretas. La mañana se dividió en tres secciones temáticas. Entre una y otra, se invitó a los participantes a intercambiar ideas y reflexionar juntos sobre lo que podían extraer de lo que habían oído para sus propias vidas.
En primer lugar, Marina Sienz, Johannes Frick, Valentin Frisch y Elisabeth Baumgartner hablaron de cómo decidieron escuchar y seguir la voz de Dios en sus vidas. Presentaron ejemplos personales de cambios de carrera, experiencias misioneras y otras decisiones importantes que han dado forma a sus vidas.
Piedras para moler en tu propia santidad
En la siguiente ronda, Silke Müller, Bodo Jansen y el padre Frank Riedel también dieron su opinión. Los tres han experimentado cómo circunstancias que al principio no les “gustaban” se han convertido en dificultades y retos que les han permitido crecer y convertirse en “piedras para moler” en el camino hacia el cielo.
Descubra al inventor
Para la última ronda, Johanna Denkinger, Alex Miller y Marlene Scharf subieron al escenario y a la pantalla. Johanna habló sobre lo que la idea del Padre Kentenich sobre el Ideal Personal (IP) le inspiró y sobre cómo se propuso descubrir el plan original que Dios tenía para ella. La describió como una “contraseña” que da sentido, orientación y seguridad a las propias acciones. Para buscar su IP, dio a la audiencia el siguiente consejo: “El proceso tiene varias capas, es alegre y debe crecer. Se trata más bien de encontrar lo que ya está dentro de mí y de conocerme mejor». Varias preguntas pueden ayudar a ello, por ejemplo: ¿Qué les gusta de ti a los demás? o ¿Qué huella quieres dejar?”.
Al final, los moderadores resumieron: “¿Quién, si no la ‘secretaria de nuestro inventor’, que nos creó, podría acompañarnos mejor en nuestra búsqueda de sentido? Es como si María nos dijera hoy de nuevo: Voy contigo y te necesito. Nada sin ti, ¡nada sin mí!”.
Programa nocturno con ambiente «Wetten, dass…«
Por la tarde, numerosos talleres creativos, musicales, espirituales y de vida práctica esperaban a los participantes.
A continuación, tuvo lugar un programa nocturno similar a “Wetten, ¿dass…?” (un conocido programa de la televisión alemana). Una vez más, comenzó con la canción principal del fin de semana: “En busca de sentido en las profundidades de nuestro tiempo. Mi camino a través del laberinto, hasta que la claridad llame dentro de mí. Pensar en grande, mi ideal en el que quiero centrarme, incluso a pequeña escala, en lo cotidiano, encuentro mi propio estilo”, resonó por todo el ruedo antes de que varios grupos de personas demostraran sus habilidades en las “áreas sensoriales” del gusto, el oído y el olfato. La iluminación y los efectos de sonido, apropiados y muy profesionales, crearon la sensación de espectáculo perfecta. El festival se encaminaba así hacia su punto culminante: la “Noche de la Alianza de Amor”.
Los participantes, después de haber participado con alegría y activamente el programa recreativo, se dirigieron a la Iglesia de Peregrinos, decorada con un resplandor atmosférico rojo y la luz de innumerables velas. Tranquilos y recogidos, absorbieron los impulsos y se dejaron llevar por la profunda atmósfera creada por los cantos de adoración.
Los textos dejaron claro que la búsqueda de sentido puede estar asociada a la alegría, la curiosidad y el valor de descubrir, pero también a los miedos, a muchas preguntas, a situaciones desafiantes, es decir, a todo lo que contribuye al crecimiento personal.
Todo esto se llevó a Jesús en oración, presente en la hostia de la custodia sobre el altar. También hubo tiempo para el silencio, la alabanza, la oración y para escribir una carta muy personal de la Alianza de Amor. Al final de la celebración, esas cartas encontraron su lugar en el santuario de plexiglás, que se instala en el Santuario Original en cada Noche del Santuario.
La renovación de la Alianza de Amor en este lugar fue un momento especialmente emotivo.
En busca del sentido: dejar que Dios te encuentre y te cambie
A la mañana siguiente, los jóvenes empezaron un poco somnolientos y callados, pero, al son de la banda del festival «7 for heaven», pronto se mostraron despiertos y motivados, llenos de expectativa por la misa de clausura. El equipo de logística había organizado cuidadosamente pabellones y numerosas sombrillas, lo que evitó que la mayoría de los participantes tuvieran que sentarse bajo un sol abrasador. “Desde aquí arriba, tengo la sensación de estar en la playa”, dijo sonriendo el padre Horst Rönn-Hass, que presidió la misa, al dar la bienvenida a los participantes.
En su sermón, el padre Hans-Martin Samietz se refirió al que llamó el más famoso buscador de sentido del siglo XX: Victor Frankl. Como judío encarcelado en un campo de concentración, definió el sentido de su vida de este modo: “El sentido es el encuentro con el propio destino”. Esto demuestra la conciencia de que las personas también pueden descubrir el sentido en el sufrimiento y la resistencia. Samietz comparó la búsqueda de sentido con la imagen de una planta de frijol: su tallo crece hacia arriba, al tiempo que echa raíces en lo más profundo de la tierra. En la búsqueda de sentido, ambas direcciones —la clara y hermosa, y la oscura y pesada— son importantes, y ambas contribuyen al crecimiento.
La noche del Santuario 2024 llegó a su fin entre aplausos para el equipo central, los distintos sub-equipos y sus ayudantes. La noche del Santuario 2025 tendrá lugar del 5 al 7 de septiembre de 2025. Más información: info@ndh.de / www.nachtdesheiligtums.de
Fuente: schoenstatt.de
Traducción: Hna. M. Lourdes Macías
