Estamos en un momento de inflexión, de cambio de paradigma a nivel global. Mas de un siglo después del nacimiento del movimiento de Schoenstatt, éste sigue más vivo que nunca.

Lo local y lo global cada vez cobran más fuerza. La unión de espíritus y mantener la Alianza de Amor es nuestra razón de existir para, que perdure su esencia y se proyecte al mundo. Volver al origen, volver a nuestra esencia, a nuestra herencia nos dará fuerzas e inspiración para seguir siendo testigos de María y aportando la Luz de Cristo al mundo.

Necesitamos recursos para mantener el Santuario Original, un símbolo de nuestra historia y fe, y su entorno inmediato, que cada año recibe la visita de miles de personas. También debemos hacer frente a los gastos derivados de las investigaciones relacionadas con la causa del Padre Kentenich.

También necesitamos disponer de más recursos para mantenernos comunicados. Saber unos de otros, coordinarnos y organizarnos para enriquecernos mutuamente. Es por ello que debemos asegurar y mantener la Coordinación Internacional del Movimiento, que entre otras cosas, es responsable de la comunicación oficial del Movimiento de Schoenstatt: gestiona la página web, opera las redes sociales, cultiva el contacto con Familias de Schoenstatt nacientes en nuevos países y apoya su desarrollo, además de representar al Movimiento internacional en la Presidencia General.

Una vez más, gracias por tu apoyo incondicional
y por ser parte fundamental de nuestra familia de Schoenstatt International.