A continuación el video-mensaje del P. Alexandre Awi Mello, Presidente de la Presidencia General del Movimiento Apostólico de Schoenstatt:

Subtítulos en español disponibles en el vídeo

Estoy aquí en Roma, donde hemos recién terminado el encuentro de la Presidencia Internacional de la Familia de Schoenstatt, donde se reúnen los responsables por los institutos, las federaciones y también por el movimiento de Schoenstatt en todo el mundo: la coordinación internacional del movimiento. Así que cuatro veces al año nos juntamos para reflexionar sobre la realidad de la familia internacional de Schoenstatt. Y esta vez estuvo muy bonito, pudimos manifestar nuestra alegría de estar juntos como familia. Esta experiencia de, juntos, tratar de escuchar la voz de Dios, lo que el Espíritu Santo nos inspira como familia. Y eso es justamente la sinodalidad, lo que la Iglesia está viviendo. Por eso el primer día escuchamos el testimonio de tres personas que vivieron directamente el Sínodo. Escuchamos también la importancia de unir sinodalidad y el carisma de nuestra familia. Por eso podemos decir que tuvimos una semana muy bendecida y queríamos simplemente comunicarles que, para nosotros, los temas más importantes han sido justamente estos: Cómo vivir la sinodalidad en nuestra familia de Schoenstatt; cómo seguir transmitiendo el carisma de nuestro fundador en el tiempo de hoy, para nuestra realidad actual. Y también estuvimos reflexionando sobre la importancia de la juventud y del futuro de Schoenstatt que está en sus manos. Estos son apenas algunos de los muchos temas que hemos tratado en estos días, pero estamos seguros de que la Mater, acá en su santuario “Madre de la Iglesia”, el santuario del Centro Internacional de Schoenstatt, nos estuvo bendiciendo y tuvimos muy presente a cada uno de ustedes. Por eso, gracias por los que rezaron por este encuentro y queremos seguir caminando juntos, sinodalmente, en el espíritu de nuestro padre y fundador. Cor unum in Patre. ¡Que Dios los bendiga!