Cómo surgió el Santuario Joven
En 1997 el único santuario de Schoenstatt en Paraguay era el de Tuparendá, que actualmente es conocido como el santuario nacional y que en 2021 cumplió 40 años de su bendición. Pero las juventudes Masculina y Femenina anhelaban un santuario filial de Schoenstatt en Asunción, que fue impulsado y conquistado por la juventud y precisamente por eso lleva el nombre de Santuario Joven. En realidad, el propio Movimiento de Schoenstatt nació en Paraguay de la mano del primer grupo de la juventud masculina, que llevó por nombre “El corazón como escudo” y en el que se encontraban, entre otros, dos de los sacerdotes que reimpulsaron la fundación, el padre Antonio Cosp (+) y monseñor Claudio Giménez.Emoción, historia, banderas y pañuelos
Preparativos con entrega

Se repitió el recorrido por el barrio de hace 25 años

Deben haber sido muy pesados para que se haya logrado tener el Santuario
La misa presidida por el padre Santiago Ferrero tuvo la participación de los sacerdotes que trabajan con los jóvenes paraguayos y las familias paraguayas, además de todos los que realizan su noviciado en Tuparendá.“A ella le debemos también la fuerza y la convicción de esos los jóvenes que en los años 90 lucharon e insistieron, deben haber sido pesadísimos, para que tengamos un santuario en la ciudad y a ellos, especialmente, al cumplirse 25 años, les queremos dar un aplauso y agradecerles”,mencionó el padre Santiago en medio de su homilía.
Ven Espíritu Santo, reaviva el corazón joven
En otro momento destacó:“No se puede celebrar lo abstracto, no se celebra en realidad un jubileo, no se celebran 25 años. Se celebran su gente, se celebran sus acciones, se celebran sus actividades, se celebran los grupos concretos, se celebran las personas concretas con sus historias, celebramos nuestra familia de Schoenstatt concreta de este Santuario Joven como es, con nuestras imperfecciones, con nuestras manías, nuestras neuras, con nuestra dificultad de gestar una familia más unida, más en comunión, más en paz, esa es la familia y esos somos los que celebramos: personas concretas, historias concretas, porque tampoco celebramos ideales sino lo que esos ideales logran hacer en nuestros corazones”.Se agradeció también al matrimonio de don Víctor y doña Chiquita Fadul, quienes generosamente donaron su propiedad para que allí se instalase el Santuario. Todas las comunidades hicieron sus ofrecimientos, como agradecimiento por las gracias recibidas en estos 25 años, y como entrega para que el Santuario Joven siga dando abundantes frutos para la Familia de Schoenstatt en Paraguay.
