El viernes 6 de agosto de 2021 se celebró una ceremonia en el Centro «Reina de la Confianza», de las Hermanas de María de Schoenstatt en Bujumbura, en Mont-Gikungu, Burundi, para entregar los certificados a los participantes del curso que habían completado la formación profesional como costureras en el Centro Akazoza Keza. Luego de seis meses, 20 chicas y mujeres desempleadas han completado la formación de costureras con gran entusiasmo.

El centro «Akazoza Keza» fue inaugurado el 6 de febrero de 2021 por las Hermanas de María, apoyadas por Académicas de Schoenstatt de Alemania.

En Burundi el sistema escolar prácticamente no ofrece acceso directo a una profesión. En general la formación profesional es insuficiente. Dado que la pobreza es un factor importante que impide a las personas desarrollar sus capacidades, ganarse la vida y valerse por sí mismas, el centro quiere ayudar a los participantes del curso a desarrollar sus capacidades personales, darles acceso a la vida profesional mediante la formación, y además les ofrece la posibilidad de crecer en la fe.

El objetivo es enseñar a las niñas y mujeres desempleadas a confeccionar para que puedan aprender un oficio práctico con el que ganarse la vida.

Las ceremonias de entrega de los certificados se abrieron con una Santa Misa celebrada por el abate Nicolás, profesor del Seminario Mayor de Bujumbura. En su homilía felicitó a las Hermanas de María y a los graduados. Les aconsejó que fueran siempre conscientes de que están sirviendo a Cristo al ayudar a la gente a vestirse bien. Que la Virgen María sea su modelo en el servicio que prestan a la sociedad.

La Misa fue seguida por la presentación de los testimonios donde la señora Juliette, de las Académicas de Schoenstatt de Burundi, ofreció las palabras de bienvenida.

Dos jóvenes de la misma comunidad contribuyeron al éxito de la celebración y a un ambiente alegre con su baile.

La Hna. M. Lisette, la Hna. M. Françoise y la profesora del curso de costura, la Sra. Adèle, así como otros miembros del personal del proyecto, entregaron los certificados a continuación. La señora Adèle tuvo palabras de elogio para cada participante. Una de ellas tenía un bebé de dos meses, y perseveró a pesar de las muchas tareas y ocupaciones con su familia. Otra participante encontró muy difícil usar la máquina de coser, fue al Santuario de Schoenstatt para encomendar todo a la Virgen María.

A continuación, las mujeres graduadas dieron las gracias a las Hermanas y a su profesor. La celebración concluyó con un discurso de la Hna. M. Françoise, quien felicitó a los participantes delel curso por permanecer fieles a lo largo de los seis meses, dio las gracias a la profesora por su diligencia en la enseñanza y, por último, a todos los que, de cerca y de lejos, habían contribuido al éxito del proyecto, incluidos las Académicas de Alemania.

Hna. M. Françoise expresó su esperanza de que los graduados del curso que acababan de recibir sus certificados pudieran salir adelante y dejar atrás el desempleo. Marcó que esto animaría a todos a continuar esta formación para otros tengan acceso a la misma. Al finalizar el brindis hubo que sacar muchas fotos de los vestidos que ellas mismas habían cosido.