Capital de Gracias

La enseñanza de la Iglesia sobre los méritos y nuestra posibilidad de cooperar en la obra de salvación de Cristo (véase Col 1, 24: “ Ahora me alegro en medio de mis sufrimientos por ustedes, y voy completando en mí mismo lo que falta de las aflicciones de Cristo, en favor de su cuerpo, que es la iglesia”) nos anima a esforzarnos activamente por la santidad y estar disponibles para la construcción del Reino.
Una forma especial para esto en Schoenstatt es las “Contribuciones a la capital de la gracias”. En la Alianza de Amor con María, llevamos activamente nuestras oraciones, sacrificios y esfuerzos por la santidad y ponemos los méritos de estas buenas obras a disposición de la MTA para su misión al servicio de Cristo.
La imagen de «capital» se toma de las finanzas, donde es necesario reunir grandes sumas para llevar a cabo grandes proyectos, como fundar una empresa. A partir de 1915, Schoenstatt ha hablado de un tipo diferente de Capital: Lo que traemos a María en el Santuario se reúne (como el dinero de diferentes inversores) para ayudar a la MTA en cualquier tarea importante que tenga en mente desde el Santuario, especialmente las relacionadas con la renovación moral y religiosa del mundo en Cristo. Debido a que el “capital” no es financiero, sino en gracias, es que se llama “capital de gracias”.
El fundamento teológico para esto se encuentra en la enseñanza de la Iglesia compilada en el Catecismo de la Iglesia Católica, bajo al comunión de los santos (N° 945-948), la oración de intercesión (N°2634-36) y los méritos (N°2006-2011)
